Los colores del vestido de novia
Actualmente, en el mundo occidental, el color del vestido de novia más habitual es el blanco. Sin embargo, cada vez más se está rompiendo con los modelos tradicionales y hay algunas novias que se aventuran a elegir otro color para celebrar el mejor día de sus vidas. En otro artículo hemos explicado el origen del vestido de novia de color blanco. En este artículo, no solo te contaremos el significado de los diferentes colores del vestido de boda sino que además, te daremos opciones de las tonalidades del vestido blanco.
Los colores del vestido de novia y sus significados
- Rojo: Emociones fuertes e intensas. Se asocia a la pasión, el amor, la energía y la fuerza.
- Verde: Naturaleza. Simboliza la fertilidad, la frescura, el crecimiento, el equilibrio y la serenidad.
- Azul: Tranquilidad y calma. Simboliza la honestidad, la harmonía, el bienestar y la paz.
- Naranja: Positividad y alegría.
- Amarillo: Optimismo y energía.
- Dorado: Simboliza el sol, la belleza, la abundancia, el éxito y el poder.
- Violeta: Pureza y serenidad.
- Negro: Seriedad, elegancia y misterio.
Tonalidades del color blanco
Si no te convence ninguno de los anteriores colores pero sin embargo quieres darle un toque único a tu vestido de novia, ¡te damos las opciones que necesitas! El propio blanco tradicional puede tener diferentes tonalidades, lo que le otorga su carácter único y lo que te permitirá encontrar tu vestido ideal. Estas son las tonalidades más habituales:
- Rosa empolvado: una perfecta mezcla entre beige y blanco. Es suave, elegante y muy favorecedor. Recuerda un atardecer en las playas rosas.
- Perla: un blanco con un toque grisáceo que recuerda al color plateado. Suele ser usado por mujeres más bien mayores, ya que el color se asocia con la elegancia y la madurez.
- Marfil: este es más parecido al beige pero mucho más aclarado. Queda estupendamente en mujeres con curvas y es tremendamente elegante y favorecedor.
- Champagne: su nombre viene de la propia bebida y se debe a que el color es muy similar: con toques dorados y brillantes pero sin perder su suavidad.
- Nude: esta tonalidad ha ganado mucha popularidad en los últimos tonos en diferentes ámbitos (como el maquillaje, por ejemplo). Enamora por su sencillez y naturalidad, ya que se fusiona con el color de la piel .
- Crudo o blanco roto: este es el color más típico de los vestidos de novia, pero no por ello menos original. Es un color apagado que favorece enormemente a la novia. Da un efecto natural y fresco.
- Blanco natural o blanco nieve: tal y como indica el nombre, el vestido recuerda al color de la nieve. Puro y precioso.
- Blanco puro o blanco óptimo: este color destella con tonos azules y fríos que hacen que el vestido de la novia sea el centro de atención en la boda.